lunes, 28 de noviembre de 2011

ROBERTO MARTIN LUNA ORTEGA


AD INFINITUM





...mientras tanto en una corte en Trujillo...

(Poema a dos voces)





Veintidós procesos judiciales

culpables todos

descargo procesal

salgo en abril



Abril salvaje,

robo y pillaje

extorsión.

Golpes, sangre y balas.



Muerte al fiscal.

Muerte

innecesaria, despiadada



Veintidós procesos judiciales

culpables todos

descargo procesal

salgo en abril















MIS MUERTOS





Mis muertos,

los finaditos.

Me persiguen, llegan a medianoche,

se posan al pie de mi cama.



Me miran quietos y tristes,

con sus ojos vacíos,

me persiguen en la oscuridad.

Lloran silencio en su pena infinita.



Tomé sus vidas

antes de tiempo.

Jugué a ser Dios

y así los quebré.

Ahora me persiguen por siempre

hasta la eternidad.



Desvelan mi sueño.

Absorven mi vida

en un eterno silencio.



Reprimenda innombrable

me juzga bajo la máscara.



Mis muertos,

los finaditos.

Llenos de amargura y dolor

clavan sus ojos vacíos

preguntan sin hablar:



Mis finaditos

están tristes

sus almas pesadas y largas

atadas al pie de mi cama



No se van nunca

se quedan acá.



Y yo,

en esta húmeda celda

los acompaño hasta la eternidad.









XII





Al fondo,

en la oscuridad,

destella un tenue y

cobrizo resplandor.



Dos fumones,

empiezan su danza mortal

escondidos en el basural.



El olor empalagoso y dulzón

se mezcla con la fetidez

y la mierda que brota del pasadizo,

corre a través del ducto.



Al ducto, al ducto

Se entra cantando

se sale gateando.



La pasta se elva en el aire,

llega a mi nariz

y despierta otra vez.

El dengue, el dengue

otra vez.













EL PUNTO





Cae la tarde

sobre el punto del día.



Sale el sol

del bolsillo.